BIEN
VENI
DOS
DOS COCINEROS
Albert y Mélina, han deseado comenzar una historia, y que mejor como punto de partida que Ambassade de Llívia donde se une la tradición, la evolución y la calidad.
Una casa donde se vive intensamente el recetario clásico de la gran cocina francesa y se huye de las tendencias y modernidades, pero con ciertos toques contemporáneos.
El restaurante “seguirá el concepto de un restaurante transfronterizo”, explican. En una oda culinaria al origen de Albert y Mélina así como la situación geográfica. Se han propuesto crear un híbrido francés-catalán. “Sera de estilo clásico, por un lado la cocina francesa, mezclada con la tradición de la cocina catalana y los productos de la región”.
